La Madonna del Magnificat

La Madonna del Magnificat fue creada por Alessandro Botticelli en 1480-1481. La pintura representa a la Santa Madre, María, sosteniendo a Jesús como un bebé mientras escribía en un libro, ya que dos hombres, posiblemente figuras angelicales, tienen una corona sobre su cabeza. María mira a Jesús, y al mundo, sombríamente, sabiendo su destino por venir. El tono de esta pieza de arte religioso, creo, es atribuible al período de tiempo y lugar en el que fue creado. Sandro Botticelli era un artista renombrado durante el período temprano del renacimiento en Florencia, Italia. El catolicismo ávido fue enfatizado en gran parte durante el tiempo del renacimiento, especialmente el período anterior; También es factual que una gran mayoría de italianos practican el catolicismo. La cantidad de provocación religiosa, y el tipo de ambiente retratado por la Iglesia, en el tiempo de Botticelli ayuda a comprender el verdadero simbolismo de la pintura. Alrededor de la misma época de la creación de la "Madonna del Magnificat", Sandro fue convocado por el Papa Sixto IV para ayudar en la creación de obras de arte utilizadas para decorar la Capilla Sixtina. Este hecho también ayuda a proporcionar pistas sobre el verdadero significado de la pintura en que, en ese momento, fue influenciado por el Papa, que puede haber empujado sus propias ideas en Sandro, para crear cierto tipo de arte religioso. Italia se dice que ha sido el "corazón y el alma" de las primeras etapas del Renacimiento. Esto se cree que es debido a las promociones de San Francisco de Asís de encontrar formas más individualistas de conectar con y alabar a Dios. Aunque la promoción del individualismo fue un factor importante en la Italia temprana, muchos no cristianos fueron perseguidos ya menudo quemados en la hoguera. Estos hechos demuestran además la teoría de una fuerte presencia católica en toda la vida de Botticelli. Durante estos tiempos, la Iglesia Católica Romana fue aparentemente piteous, promoviendo a la gente a ser más triste y consciente de los acontecimientos bíblicos en un nivel personal.

Como se mencionó anteriormente, Alesandro Botticelli fue un pintor tan reconocido de su tiempo que fue llamado por el Papa a colaborar con otros artistas para pintar religiosos para el embellecimiento de la Capilla Sixtina. Esto sucedió en 1481, alrededor del tiempo Botticelli se rumorea para haber estado en el proceso de la pintura "Madonna del Magnificat". Si su participación en la decoración de la capilla y en la cercana presencia del Papa ha influido en la pintura, nunca lo sabremos realmente, aunque hay un grupo de personas que tienen una presencia evidente en su obra. La familia Medici gobernó lo que ahora se conoce como Italia, desde principios de 1400 hasta finales de 1700. La familia era conocida por tener un gran aprecio por las bellas artes, teniendo su propio estudio de arte en su palacio donde varios artistas vivían y trabajaban para ellos. Filippo Lippi fue uno de los artistas de Medici y se llevó a Botticelli, convirtiéndolo en su aprendiz. Dentro de las puertas de las mansiones Medici, Botticelli fue expuesto a la cultura mucho más allá del alcance de las personas ordinarias en ese momento. Se inspiró en las ideas filosóficas de los hermanos Medici y sus amigos, y con su respaldo, comenzó un nuevo género de arte religioso. En lugar de describir acontecimientos bíblicos fácticos, ató a estos acontecimientos míticos dioses y diosas, imágenes simbólicas, emociones que provienen de la imaginación en lugar de las normas sociales, e incluso algunos miembros del clan Medici se representan en varias de sus piezas.