Aphrodite

Alegoría del triunfo de Venus. Bronzino -1540,1550

Aprovecho el día del amor y la amistad para mencionar una de las grandes figuras en la historia del arte, una representación que va más allá de su significado, su presencia es tan importante para el arte, que me atrevo a decir que es parte de su sistema principal. Para nosotros, como andantes sonámbulos desisteresados, es como oxígeno; siempre mendigando cada una de sus diferentes formas y representaciones. Como ella cambia a través del tiempo y deja inmersa nuestra agonía en su perfección -ejemplificación de la feminidad- y su divinidad. No obstante es una figura que se presta para muchas interpretaciones, filosófica, mitolágica, entre otras; para mi, sin su presencia, el arte no sería el mismo. Quizá no existirian épocas artísticas tan importantes para la historia como lo es el Ranacimiento y la pintura neoclásica, donde en la gran mayoría de obras se encuentra en primer plano. También la encontramos en esculturas y arquitectura. Es un ícono, el cual no podemos pasar por alto, a pesar de algunas formas que pudo tomar en la antigüedad, pienso que lo mejor, es ver a través de su belleza inagotable y a partir de allí, observar lo hermoso que es el cuerpo humano. Como Dios nos hizo tan perfectos, reflejarnos en su belleza y en las obras que tanto nos reconfortan y nos dan vida. Gracias Velásquez, Botticelli, Tiziano Bronzino...